Descripción:
Es muy común que nuestro animal se produzca múltiples rasguños y heridas, en principio no deben preocuparnos excesivamente pero deberemos prestar especial atención al lugar donde se producen y a su curación (observar si tarda excesivo tiempo en sanar).
Lo más importante es limpiarla a fondo, con el fin de que el animal no contraiga otras enfermedades, para ello le recomendamos que siga las siguientes instrucciones:
- Lave la herida con un chorro abundante de agua fría: esto ayudará a contraer los vasos sanguíneos al tiempo que eliminaremos la suciedad y la sangre coagulada, con lo que podremos analizar mejor la herida.
- También puede utilizar una solución salina para lavar la herida y las zonas circundantes: una cucharada de sal de mesa disuelta en un litro de agua.
- Si se trata de una herida superficial, le recomendamos que la proteja con aceite de ricino.
- En caso de que la herida sea importante y resulte obvia la necesidad de dar puntos, deberemos tapar la herida con un vendaje ligero, dejando todo lo demás en manos del veterinario.
- Nunca hurge en una herida para determinar su profundidad.
- Si se produce una hemorragia, deberá intentar cesarla presionando la herida con una venda, para lo cual colocaremos previamente una gasa o pañuelo limpio sobre la misma.
- En caso de que existan trozos de madera, metal o algún otro objeto clavados en la herida, deje al veterinario la tarea de retirarlos y deje la herida destapada.
- Evite que el caballo se toque las heridas.
- Compruebe que la vacuna del tétano está al día.